domingo, 2 de mayo de 2010

El sueño de una noche fría de Mayo

Hace frío aquí,
pero el sudor se desliza
por mi piel,
por la ventana abierta
no entra brisa,
y siento una gota,
una lágrima
descendiendo por mi espalda,
y sigue haciendo frío
en este sitio.

No sé dónde estás,
quizás ni tú misma lo sepas,
son las 5 de la mañana,
¿cómo ibas a saberlo?
Sentados
a la sombra de una farola,
la luz de la luna me engaña,
te miro a los ojos,
verdes, claro que sí,
me hablas de música,
te escucho embelesado,
río cuando tú ríes,
muero cuando no estás.

Hace mucho frío,
se derriten las horas
ahí fuera,
el sol brilla como si fuera
a desvanecerse
de un momento a otro,
y yo tan sólo siento frío
dentro de mí.

¿Sabes?
A veces (no siempre)
me cuesta decir las cosas
a tu cara bonita, de verdad,
es como si te conociera
desde siempre,
y quizá por eso pienso que
sobran las palabras,
pero nada más lejos,
tú, cada vez más lejos,
yo, escribiendo en papeles mojados.

Veo el mar, en el horizonte,
escondido apenas tras las dunas
del color de tu piel;
atardece, y no hace frío,
tú me cantas al oído,
me acaricias el rostro
y me besas el cuello,
no hay mañana,
no hay ayer,
no hay nadie,
sólo estás tú.

1 comentario:

  1. "no hay nadie
    solo estás tu"

    Hay seres que son destinos..

    Un saludo :)

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