lunes, 13 de septiembre de 2010

Ausente del aire
y el ruido de las olas,
ausente de palabras
innecesarias,
observo el mar
sin pensar en nada
en concreto;
los minutos pasan,
y el mar se mece
en paz suprema;
a ratos despierto
y te veo a mi lado
hablándome de él,
un espejismo,
tan transparente
como la brisa
que sopla.

1 comentario:

  1. Siempre me quedo enganchada a tus escritos pero no siempre encuentro las palabras para contestarte... hoy he pensado que era el día, anoche soñé que te conocía en la realidad, nada especial, simplemente te veía en mi facultad y comíamos...:P Me pareció una especie de señal de que debía contestar de una vez por todas y dejar que mis palabras te dijeran lo mucho que me dices con las tuyas, consigues hacerlo siempre... :P

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