sábado, 28 de mayo de 2011

Encerrando las emociones bajo llave,
atrapando miradas al vuelo,
dejando pasar los días y las horas
como quien ve alejarse un ave
en un cielo nublado,
te pierdo la pista y las miradas,
olvido el aroma de tus besos
al despertar,
esos besos que soñamos juntos
y se evaporaron con la niebla,
entre sombras y sueños.

1 comentario:

  1. Bello poema, pero no hay llave ni freno para las emociones, que libres y sin ataduras suelen volar por encima de nosotros.

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